lunes, 5 de agosto de 2013

Querida Luz.

"Las agujas del reloj se toman su tiempo. Hoy deciden multiplicar cada segundo y hacer de mi espera, un momento eterno.
Estoy sentada en nuestro lugar, donde cruzamos nuestras miradas por primera vez. 
Las fantasías lúgubres que crea mi mente, y las esperanzas con mariposas de mi corazón, chocan a cada instante y me dan una dósis de electroshock.
Todavía no son las 5, estoy a tiempo de irme y poder evitar este momento, quizás vergonsozo, o quizás perfecto. 
No sé qué pensar, tampoco sé si mi cerebro se dignará a ponerse de acuerdo con mi boca y podré articular alguna palabra. 
¿Podré decir la verdad?, ¿Y si no es recíproco?, ¿Podré enfrentar la posibilidad de que terminen en la basura tantos años de amistad?.
Cada pensamiento me pone aún más nerviosa, cada pregunta me lleva a otra más detestable y terminan inundandome en una cataráta de lágrimas que mis ojos intentan contener. 
No, no puedo. Ya estoy llorando. 
Los recuerdos me invaden, no sólo los nuestros, sino que también los mios, los que jamás le he contado a nadie. 
Viene a mi mente aquella pequeña, con su vestidito azul con flores celestes, sus ojos color café y su sonrisa tierna. Se asoman con ella esos días de espera y sueños, y a su lado, la esperanza de que su Príncipe Azul llegue. ¿Será real lo que he leído en cuentos? 
Y hoy ésa pequeña ha crecido, y esta a escasos segundos de poner a prueba a los libros, ¿La Cenicienta habrá encontrado verdaderamente a su amado, el zapatito le habrá entrado?. ¿Julieta habrá muerto en vano, o su Romeo realmente la ha adorado?. 
Tengo miedo. Sí, éso tengo. 
Tengo miedo de que todo sea una mentira, y que simplemente todo haya sido obra de mi estúpido corazón. 
He estado soñando con este momento tanto tiempo. El momento en el que mi Príncipe me de el tan ansiado beso y yo despierte de un cuento, el momento en el que mi Noah me bese apasionadamente y dejé de ser una simple historia de amor. 
Tengo miedo de que no sea real, de que mi vida jamás pueda reflejar tanto amor y felicidad. 
Sinceramente no sé por qué sigo sentada acá, tampoco entiendo por qué lo cité, creo que me olvidé que esto no es un cuento, ni una película de amor, simplemente esto es la vida, y no siempre sucede lo que uno quiere.
Mientras pienso  me animo a mirar el reloj, y aún faltan dos minutos para las 5, el tiempo es muy tirano, y yo también lo soy conmigo. 
Por eso me paro y decido irme. 
Prefiero callar este amor, no quiero forzar la situación ni romper lo que construímos desde aquel 16 de marzo de 1989 hasta hoy. 
Quien lea esta carta debe estar preguntandose por qué decido confesarme y redactar mis sentimientos en este instante si mi intensión es dejar este momento en la oscuridad. 
En realidad no pretendo que alguien la lea, sólo quiero soltar lo que llevo dentro, gritarlo en silencio y dejar mi amor plasmado en estos garabatos, para recordar y saber que alguna vez fue real, que alguna vez amé y dolió. Pero dicen que así es el amor y es por éso que hoy yo elijo la amistad, aunque mi Amor por Èl me recorra cada célula y quede tatuado en cada rincón de mi cuerpo.
Luz.
30 de abril, 1990 "

Suena el timbre. 
Una carta, la abro. 
-La letra de Luz! Pero con el remitente de su madre.
-¡Qué raro.! Hace tantos años que no hablamos, ¿10?, ¿15?, me sorprende recibir algo de ella.
La miro detenidamente. 
-Que desgastado está el papel, con razón, es de 1990.
Sin más prisa, me decido a leerlo. 
Reposo mis ojos en cada letra, mientras mi boca se abre cada vez más por la gran sorpresa.
-Me ama, digo, me amó. O me seguirá amando?. Aquel día me había dicho que no pudo ir por su dolor de cabeza, todavía lo recuerdo como si fuera hoy, su voz suave al teléfono disculpandose, aunque un poco cortada. Ahora lo comprendo. 
Y al pie dice, 'Encontré esto en una bolsa con escritos viejos de mi querida Lucecita, creí que lo correcto era que lo sepas.'.
Realmente no sé que hacer, eramos tan chicos, ambos llenos de sueños, y ambos con el mismo amor,  pero ninguno se animó.
-¡Qué tonto fuí!. ¿Qué será de su vida hoy?.
Los dos dejamos pasar el momento, nos inundamos de codicia y separamos nuestros senderos, pero la vida me ha dado la derecha, si esto llegó a mi es porque estoy a tiempo de empezar lo que debimos haber empezado, estoy a tiempo de poder adorarla como Romeo a Julieta, y besarla como Noah a Allie. 
Por éso decido no dejar que el tiempo siga siendo tirano, y me siento en mi escritorio. 
Agarro una la picera y un papel, y con la esperanza de que no sea tarde dejo que mis sentimientos y pensamientos abasallen la hoja y empiezo a escribir nuestra historia de amor diciendole, 
'Querida Luz....'.

martes, 2 de julio de 2013

...

Si para recobrar lo recobrado 

debí perder primero lo perdido, 

si para conseguir lo conseguido 

tuve que soportar lo soportado, 

si para estar ahora enamorado 

fue menester haber estado herido, 

tengo por bien sufrido lo sufrido, 

tengo por bien llorado lo llorado. 

Porque después de todo he comprobado

que no se goza bien de lo gozado 

sino después de haberlo padecido. 

Porque después de todo he comprendido

que lo que árbol tiene de florido 

vive de lo que tiene sepultado.

jueves, 20 de junio de 2013

Acá estoy.

¿No lo ves?
Allá, a lo lejos.
Danzando al compás del viento.
Esperando a que un día abras los ojos y te animes a perseguirlo.

¿No lo sientes?
Aquí, cerca.
Repiqueteando al compás de tus suspiros.
Esperando a que lo sientas desde tu corazón.

Lo sé, no lo ves, ni lo sientes, pero está. 
Sólo tienes que sacar la venda que recubre tu cuerpo, 
y animarte a avanzar, 
por el simple hecho de que, aunque no lo creas 
y a veces te des por vencido, todavía, 
te esta esperando. 




miércoles, 19 de junio de 2013

Hay, siempre hay.

Hay un lugar
para nosotros,
en alguna parte,
un lugar para nosotros.
Paz y tranquilidad
y al aire libre
espera para nosotros
en alguna parte.

Hay una época para nosotros,
un cierto día
una época para nosotros,
tiempo junto
con repuestos del tiempo,
tiempo a aprender,
mide el tiempo para cuidar,
¡un cierto día!

En alguna parte.
Encontraremos
una nueva manera de vivir,
encontraremos
una manera del perdón
en alguna parte.

Hay un lugar
para nosotros,
una época y un lugar
para nosotros.
Extender mi mano
y encontrarnos a medio camino.
Extender mi mano
y tocarte,
de alguna manera,
un cierto día,
¡en alguna parte!

Aprenderás.

Después de algún tiempo...

Aprenderás la diferencia entre dar la mano y socorrer a un alma; y aprenderás, que amar no significa apoyarse y que compañía, no siempre significa seguridad. Comenzarás a aprender; que los besos no son contratos, ni regalos ni promesas. Comenzarás a aceptar tus derrotas con la cabeza erguida y la mirada al frente, con la gracia de un niño y no con la tristeza de un adulto; y aprenderás a construir hoy todos tus caminos, porque el terreno de mañana es incierto para tus proyectos y el futuro, tiene la costumbre de caer en el vacío.

Después de un tiempo…

Aprenderás, que el Sol quema si te expones demasiado. Aceptarás; incluso, que las personas buenas podrían herirte alguna vez y necesitarás perdonarlas.

Aprenderás que hablar puede aliviar los dolores del alma. Descubrirás que lleva años construir confianza; y apenas unos segundos destruirla, y que tu también podrás hacer cosas de las que te arrepentirás el resto de tu vida.

Aprenderás que las nuevas amistades continúan creciendo a pesar de las distancias; y que no importa que es lo que tienes, sino a quien tienes en la vida y que los buenos amigos, son la familia que nos permiten elegir.

Aprenderás que no tenemos que cambiar de amigos, si estamos dispuestos a aceptar que lo amigos cambian. Te darás cuenta de que puedes pasar buenos momentos con tu mejor amigo haciendo cualquier cosa; o simplemente nada, sólo por el placer de disfrutar su compañía. Descubrirás que muchas veces tomas a la ligera a las personas que más te importan; y por eso siempre debemos decir a esa persona que la amamos, porque nunca estaremos seguros de cuándo será la última vez que la veamos.

Aprenderás que las circunstancias y el ambiente que nos rodea tiene influencia sobre nosotros, pero que nosotros somos los únicos responsables de lo que hacemos. Comenzaras a aprender que no nos debemos compararnos con los demás, salvo cuando queramos imitarlos para mejorar. Descubrirás que lleva mucho tiempo llegar a ser la persona que quieres ser; y que el tiempo, es corto.

Aprenderás que no importa donde llegaste; sino a donde te diriges, y si no lo sabes, cualquier lugar sirve.

Aprenderás que si no controlas tus actos ellos te controlan; y que ser flexible no significa ser débil o no tener personalidad, porque no importa cuán delicada y frágil sea una situación: Siempre existen dos lados.

Aprenderás que héroes, son las personas que hicieron lo que era necesario enfrentando las consecuencias.

Aprenderás que la paciencia, requiere mucha práctica. Descubrirás que algunas veces, la persona que esperas que te patee cuando te caes, tal vez sea una de las pocas que ayuden a levantarte. Madurar tiene más que ver con lo que has aprendido de la experiencia, que con los años vividos.

Aprenderás que hay mucho más de tus padres en ti, de lo que supones.

Aprenderás que nunca se debe decir a un niño que sus sueños son tonterías, porque pocas cosas son tan humillantes; y sería una tragedia si lo creyese, porque le estarás quitando la esperanza.

Aprenderás que cuando sientes rabia, tienes derecho a tenerla, pero eso no te da el derecho a ser cruel. Descubrirás que solo porque alguien no te ama de la forma que quieres, no significa que no te ame con todo lo que puede, porque hay personas que nos aman, pero no saben cómo demostrarlo. No siempre es suficiente ser perdonado por alguien; algunas veces, tendrás que aprender a perdonarte a ti mismo.

Aprenderás que con la misma severidad con que juzgas; también serás juzgado y en algunos momentos, condenado.

Aprenderás que no importa en cuantos pedazos tu corazón se partió, el mundo no se detiene para que lo arregles.

Aprenderás que el tiempo no es algo que puedes volver hacia atrás; por lo tanto debes cultivar tu propio jardín y decorar tu alma, en vez de esperar que alguien te traiga flores. Entonces, y sólo entonces, sabrás
realmente lo que eres capaz de soportar; que eres fuerte y que podrás ir mucho más lejos de lo que pensabas, cuando creías que no se podía más. Es que realmente la vida vale, cuando tienes el valor de enfrentarla.

jueves, 13 de junio de 2013

Más allá del suelo.

El silencio recorría cada célula, mientras se animaba a dar sus últimos pasos. 
Sabía que si cruzaba esa línea, todo dejaría de ser como antes. 
Ya no habrían mañanas de color celeste, ni el café sería del color de sus pupilas. 
Simplemente era avanzar.
Avanzar separando caminos, arrazando con una historia que fue y con la que pudo haber sido. 
Ya no era sólo silencio. Eran los lindos recuerdos que la invadían, su sonrisa que la desconcertaba, 
y las lágrimas llenando cada recoveco. 
Pero había que decidir. Había que crecer o quedarse sentado mirando la misma película una y otra vez, teniendo la certeza de que todo iba a estar bien, que unos fuertes brazos siempre estarían para sostenerla, y que una dulce melodía siempre la endulzaría.
Había que animarse a saltar y tocar el cielo con las manos, sin saber quien estaba abajo esperando, porque la mejor parte es cuando dudas y llega. Llega y te envuelve. Te hace suya inesperadamente. Llega y te ama sin que lo pidas. 
Por éso cruzó la puerta. Sin saber qué sería, qué pasaría, sólo sabiendo que su límite era el cielo y que en los momentos de soledad, sus pies no la dejarían ir más allá del suelo.

martes, 11 de junio de 2013

Disfrutar.

No corras, no persigas desesperadamente, porque te esta esperando, y cada uno va a su ritmo.
Si vos te apresuras, quien te espera y a quien vos esperas, no te cruzará, porque irás tan rápido que tu cara se confundirá con el resto de la gente, el viento tapará tus facciones y Simplemente tu corazon irá a destiempo, continuarás corriendo esperando llegar a la meta, sin haberte dado cuenta que solo tenías que sentarte, mirar a tu alrededor, respirar y disfrutar del camino, porque allí es donde encontramos lo que buscamos.

domingo, 26 de mayo de 2013

Momentos perfectamente eternos.

A veces esperamos que el 'Momento Perfecto' llegue, sin darnos cuenta que nos pasamos la vida entera perdiendo cada momento, cada oportunidad, porque todos son perfectos. 
A veces, solo se trata de no mirar hacia delante. Se trata de ampliar el horizonte,  aprender a mirar hacia los costados, o hacia atrás, y empezar a atar instantes. 
La vida nos pone momentos perfectos constantemente, que se acurrucan en nuestras manos, y nosotros sin darnos cuenta, los soltamos.
¿Cuántos 'te amo' habremos enterrado en la arena y nuestro amor jamás se ha enterado?.
¿Cuántas noches lo habremos soñado y jamás lo hemos realizado?
Cuando se siente el amor por primera vez, no hay mejor momento que aquel para envolverlo con nuestra dulce melodía y hacer que de alguna manera escuche nuestra voz. 
Porque cuando queremos darnos cuenta, la magia se ha ido, y nos hemos quedado con un agudo sentimiento en nuestro pecho, ganas de decir 'adiós', que son imposibles, por el simple hecho de que jamás nos animamos a decir 'hola'.
Y puede sonar un poco ilógico, raro tal vez, pero cuando te animas a mirar para atrás, te das cuenta que 'tu amor' siempre ha estado. 
Revisas tus fotos de pequeño, y te das cuenta que estaba ahí, que ya se conocían, que ya se sabía que iba a ser amor. Entiendo tu verguenza, eramos niños. 
Pero cuando sigues buscando, revisas tus contactos del teléfono, y te das cuenta que ahí está, que está a un número de distancia. Recuerdas que te la cruzaste aquella vez, y recuerdas su bella sonrisa que te enamoró. Pero por miedo escapaste, por miedo dejaste pasar otro momento, y entregaste un cuento perfecto al viento. 
Yo creo que este es otro de nuestros momentos, por eso te estoy escribiendo. 
Yo sé que aquel día reconociste mi sonrisa, y me regalaste una mirada, por éso busque entre mis recuerdos y encontré tu dirección y junto a él un corazón. 
Jamás fui, lo sé. Yo también desperdicié un momento perfecto. 
Pero dicen que nunca es tarde, y por éso acá estoy soltando mi amor. Pero ya no más al viento, ni a las melodías de una canción, sino que a tu puerta, para que me leas, y me digas si aún me recuerdas.
El momento perfecto es cuando se siente. 
Yo hoy siento. Lo nuestro es perfecto.
No. 
Lo nuestro es perfectamente eterno.

Hagamos el Amor y No la Guerra.

"Podría pensarte una y mil veces, pero sé que nada ni nadie te devolvería a mi.
Por eso simplemente me limito a abrir mi caja de recuerdos, sacar las cartas que me enviabas a distancia, y dejar que mis lágrimas caigan al compás de la lectura. 
Siempre las finalizabas con una peculiar frase, '¿Qué sería de mi sin tu amor?', y cuan loca será la vida que es lo que hoy me sigo preguntando yo.
¿Dónde habrán quedado todos nuestros 'te amo'?, ¿Qué viento se habrá llevado el aroma de tu perfume?, ¿Qué sería de nosotros si no te hubieras ido, si un arma no hubiese arrebatado nuestro destino? 
Nuestro amor era de novela, y el final fue aún peor, se convirtió en una película que lloraré por muchos años más, sin encontrarle una explicación.
Y debo confersar que esto es lo que más me atormenta, que la vida no me de una razón, que la vida no haya frenado la tormenta que en aquel entonces comenzó. 
Todavía no pude ver el sol.
Todavía te veo en aquel barco, con tu mano diciendome adiós, y tus labios susurrando un mensaje de amor.
Me prometiste que ibas a volver, pero el odio y la codicia de los guerreros te quemó el corazón, y dejó del otro lado del mundo un alma perdida, sin su amor.
Hoy se cumplen 20 años desde ese día en que la destrucción humana nos obligó a separarnos, y aquí estoy sentada escribiendote esta carta, que una vez más, como cada año, la esconderé en una botella y la arrojaré a aquel mar donde nuestros ojos se amaron por última vez, con la esperanza de que si aún sigues vivo, llegue a tus manos y vuelvas a buscarme
Mi piel no seguirá siendo de porcelana, ni seguiré siendo del talle dos, pero te juro que hay algo que sigue y seguirá intacto, mi amor por vos. 
Quizás algunos me crean loca, quizás la marea haya destruído mis letras, o simplmente quizás sea imposible que me leas. 
Pero hay algo que tengo en claro, el mundo le hizo la guerra a nuestro amor, y aunque ni tus cenizas aparezcan, yo en mis sueños seguiré haciendole el amor a la guerra.
Siempre tuya. 
María. 11 de noviembre 1938."


Carta de despedida.

"Jugabamos como pequeños niños, nos peleabamos sabiendo que en el fondo solo queríamos vivir abrazados, pasabamos horas caminando solos de noche como dos locos que creían que podrían llegar a la luna con solo mirarla por horas. Así eramos nosotros. Dos locos. 
Nos conocimos aquel 30 de abril, cuando aún éramos sólo dos pequeños que no sabían qué querían para sus vidas, ninguno buscaba un futuro juntos, no creíamos que podíamos sentir lo que sentimos.. Pasaron los días y segundo a segundo dejabamos de ser dos, para ser uno. Nos complementábamos y nos buscábamos constantemente... Pasábamos largas noches hablando, o quizás a veces nos mirábamos por horas, yo miraba tu rostro, tus ojos color café y trataba de entender cómo esa perfección ahora era nuestra perfección, ya no eras vos, eramos vos y yo. Eran tus manos acariciando mi piel suavemente, eran tus ojos penetrados en mi cuerpo, eran mil y una sensaciones que nos hacían volar. Eramos pasión, amor, eramos desencuentro y odio. Estabamos locos, locos el uno por el otro.
Pero cómo olvidar el día en el que dejamos de estar locos, nos convertimos en cuerdos que tomaron caminos separados para buscar futuras locuras. Aquel día no nos entendimos, no nos complementamos, no nos buscamos las manos para amarnos.. Aquel día solo te fuiste, creíste que no podíamos tener un futuro juntos.. Ya pasaron los años, me enteré que viviste noches locas, que estuviste solo y con muchas a la vez, así no eras vos, qué te pasó...? Luego me enteré que sentaste cabeza, que encontraste a tu nueva loca, y que ya estas casado... Ella te hace acordar a mi? Perdón, sé que no tengo que preguntar éso... Realmente te deseo lo mejor, espero que Ella sea la indicada, que te entregue su corazón como yo lo hice, que puedan ser dos pequeños niños que juegan ganándole a la vejez... Yo aún sigo sola, esperando encontrar un poco de locura dentro de mi cordura.. Es difícil, yo siempre fui loca, tu loca... Ya no tiene sentido ser tan lógica. Solo te escribo esta carta para despedirme, para cerrar una etapa... Hasta nunca..."
Y la selló con su sangre...
Fin.~

lunes, 29 de abril de 2013

No te extraño.

No te extraño.

Sólo extraño esa forma en la que tocabas mi pelo y yo me quedaba dormida sobre tu pecho.
Extraño cómo me rodeabas con tus brazos y dejabas un cálido abrazo impregnado en mi piel cada mañana.

Aún recuerdo como nuestras manos se entrelazaban y nos perdíamos en un mar de pasión, recuerdo nuestras miradas cómplices y las noches que pasabamos sin dormir. 

Extraño cómo las mañanas se hacían noches, y la luna se hacía sol, y nosotros ahí, seguíamos juntos a pesar de todo.
Extraño sentir amor, y saber que alguien está ahí para mi; saber que hay alguien que me quiere y me espera.

Siempre creí que iba a encontrar la felicidad si lograba amar y que me amen. 
Te econtré, me encontraste, nos encontramos. ¿Qué pasó? Extraño ser feliz.

Extraño tu mirada penetrando la mia, tus labios rozando mis labios, tu respiración amandose con mi respiración. 
Extraño levantarme y tenerte a mi lado. Ver tu rostro y entender que no necesitaba nada más.

Extraño la manera en que me hacías sentir perfecta. 
Extraño cómo me hacías creer que todo era posible y que los límites no existen a menos que nosotros los creemos.

Extraño sentir tu corazón palpitando junto al mío, después de aquellas noches que no queríamos que tengan fin. 
Extraño cómo era yo cuando estaba a tu lado.

Por eso te digo, No te extraño. 

Solo extraño cómo se siente ser amada.


Feliz día Internacional de la DANZA.


Feliz día para aquellos que se animan a ponerse alas y volar al rítmo de la música.
Feliz día para quienes cierran los ojos, y se mueven dejandose llevar por lo que les pide el alma.
Feliz día para quienes se animan a vivir esta hermosa aventura, donde no hay límites, donde todo es perfecto.
Para quienes renacen una y otra vez con cada coreografía.
Para quienes se sacrifican para luego cultivar la pasión del día a día.
Para quienes cuando suben a un escenario se transforman, y dejan salir toda su luz, sin importar qué dirán o cómo saldrá.
Feliz día para quienes pueden generar en otro los más intensos sentimientos con sólo amar lo que están haciendo.
Feliz día para quienes son libres, porque bailar nos da libertad, bailar nos hace sentir únicos e inigualables.
Feliz día para quienes se atreven a ser libres, a romper barreras, a dejarse llevar y a ser perfectos a su manera con el simple hecho de Danzar.
FELIZ DÍA INTERNACIONAL DE LA DANZA.
29 - 04 .

lunes, 1 de abril de 2013

Pequeña Inocencia.


La gota se desvanecía por la ventana, mientras Ella miraba cómo llovía, intentando descifrar las siluetas que recorrían las calles. Se acurrucaba a su almohada, y esperaba a que Él se asomara. 

Lo había cruzado con una flor amarilla en la plaza junto a su casa, y desde aquel día su mirada se encontraba 
perdida intentando reencontrarlo. 
Quizás era amor a primera vista. Algo de lo que alguna vez había oído. 
Claramente esta iba a ser su primera vez.

Su cama estaba repleta de pétalos de flores que buscaban darle una solución a su gran duda.
¿El también sentía lo mismo?

Su cuaderno estaba decorado con corazones, y signos de pregunta que algún día iban a ser reemplazados por Su nombre, el nombre de su amor. 

Por momentos la sonrisa se borraba de su rostro, delatando cómo su esperanza se reducía segundo a segundo. 
¿Realmente iba a ser su primera vez? 

Los días pasaron, las vacaciones se hacían interminables, y el reloj y su mente seguían frenados en aquel día en que las mariposas la invadieron. 

Había llegado su último día libre, se durmió temprano intentando borrar en sus sueños los recuerdos en vano de este verano. 

Hasta que amaneció y todo cambió.
Entró con su mochila color rosa, sus zapatitos de charol, y sus trenzas largas que por momentos le tapaban la cara. 
Caminó con la mirada hacia el suelo, con los nervios del típico primer día en un nuevo lugar. 
Cuando se animó a alzar la vista, increiblemente, lo vió. 
Allí estaba, parado en la fila, con su guardapolvo impecable y perfectamente planchado por su madre la noche anterior. 
Sin darse cuenta, automáticamente, los labios de Ella dibujaron una sonrisa inconfundible. Y fue tan automático y tan mutuo que Él repentinamente dejó relucir sus dientes. 
Se habían sonreído. 

Caminaron el uno hacia el otro y se tomaron la mano. 

Sus mejillas se sonrrojaron, pero todo era perfecto. Los niños estaban enamorados. Enamorados de ésa forma inocente, cálida y genuina que todos añoramos. 
Él también la había estado buscando.-

domingo, 31 de marzo de 2013

Recorrí calles congestionadas sólo para encontrate. 
No me importaba qué sería de mi, sino qué sería de ti. 
Dónde guardarías nuestros recuerdos, si me recordarías aún siendo mayor, o simplemente pasaría a ser un nuevo archivo de tu mente. 
Mil dudas me inundaban mientras mis piernas corrían más rápido que nunca, intentando desafíar la velocidad de la luz sólo para poder aunque sea abrazarte y sentirte mío nuevamente, por lo menos por unos segundos, como en los viejos tiempos. 
Corrí tan rápido que creí que estaba volando, sentía que mis alas imaginarias se impulsaban con el viento y llegaba a vos. Creí verte, te sentí a pequeños pasos de distancia, pero cuando llegué, no era tu rostro. 
Simplemente fue mi imaginación y mis ganas de amar, de volvernos a ver en alquel bar como la primera vez.
Quizas, no era necesario cruzar mares a pie para encontrarte, quizas sólo debía cerrar los ojos, sentir los latidos de mi corazón y entender que allí estarías para siempre, porque lo que fue, jamás dejará de ser.

Let it be.~

A veces, simplemente se trata de cerrar los ojos y dejarte llevar. Dejar que los recuerdos broten de sus escondites preferidos, auqellos rincones donde nadie va, los que tu mente no piensa, donde no limpias hace mucho por el solo hecho de que no quieres recordar. 
Recordar su dulce voz cuando te cantaba tu canción preferida y vos sonreías aunque no entendías ni una palabra. 
Recordar su mano agarrada a tu manito. Te agarraba tan fuerte que, desde el primer día, supiste que este amor sería para siempre. 
Recordar cuando te quedaste solo por primera vez, mientras debía irse a trabajar, y vos en un nuevo mundo dando tus primeros pasos. No quisiste soltarla, pero debiste quedarte mirándola mientras se alejaba. 
Hay tanto que recordar, tanto que desempolvar. 
Todavía queda un hueco. 
Un pequeño hueco a donde nadie ha llegado, capaz de romperte el corazón. 
Ese hueco en el que habita el más triste recuerdo. 
Aquel que ha sido alcanzado por las telarañas, que ha sido causa de tus lágrimas, de ese vacío que aún sientes, donde esta aquello que quieres olvidar para siempre.
Ese día en el que cruzó la calle y nunca más volvió. 
Y vos, ahí, mirando como se alejaba, con tu pequeña mano temblorosa porque debiste dejarla ir.
Debiste soportar como el viento se la llevaba y la desvanecía en el aire para quedar inmortal en el cielo. 
Tus lágrimas rodaban por tus mejillas, mientras intentabas negarlo. 
Luego de tantos años, es hora de buscar la llave, y animarse. Animarse a recordar, dejarse llevar, limpiar los rincones de tu mente y volar. 
Porque no te olvides que cuando sus miradas se encontraron por primera vez y sentiste su sostén, vos mismo supiste que aquel amor sería para siempre.