viernes, 11 de mayo de 2012

El amor te hace pequeña.

Siempre es la misma rutina. Cada miércoles tomo el colectivo de regreso a casa a las 6 de la tarde, y ahí estas. Parado con tus ojos color café, tu pelo negro al viento y esa sonrisa que opaca el resplandor de la luna. Te miro de reojo, busco tu mirada para que se choque con la mía y cumplir con esos dichos de 'amor a primera vista', pero ni me mirás, creo que ni te percatás de que hace más de un año que viajamos juntos y que pierdo el colectivo anterior sólo por vos.


Subimos, te sentas frente a mi. Me perfumé más que siempre, sólo para que por lo menos recuerdes mi fragancia y pienses en mi.
Me aferro a vos inconcientemente, y rozo a propósito nuestras manos. Consigo que me mires y me sonrias. Dentro mío hay una exploción de fuegos artificiales, unas ganas incontrolables de abrazarte y contarte que te sueño desde antes de verte por primera vez. Me dan ganas de contarte que ayer soñé con vos, y qe me besaste, pero quedaría como una lóca, por eso, sólo te sonrío.
Junto a vos, el viaje de una hora se resume a un segundo. Disfruto tanto tu compañía. Quisiera tenerte siempre a mi lado, y no tener que esperar a que sea miércoles para intentar hacerme ver entre tanta gente, entre tantas chicas hermosas que parecen de revista, y yo, que intento por lo menos vestirme lo más bonita para vos.
Estas mirando por la ventana, pero no! De pronto me mirás y consigo que nuestras miradas se crucen. Yo cierro los ojos. Tonta! Que tonta soy. Tu mirada me intimida y me descoloca. Respiro profundamente y los vuelvo a abrir. Increiblemente seguís con tus ojos clavados en mis ojos, creo que sabés quién soy, creo que te acordás de mi.
Muero por preguntarte tu nombre, o por lo menos hacer algún comentario para entablar una conversación, pero me da miedo tartamudear y no poder terminar una frase. No tengo valor.
Cada miércoles antes de llegar a la parada me miro al espejo y practico. Practico sonrisas, miradas, me maquillo, me peino, me despeino, y me vuelvo a peinar. 'Hola, soy María y vos?'. Pero no, definitivamente no tengo valor. No soy tan especial como las demás, solo soy yo, una simple chica, en la que como hasta ahora, nunca te fijaste, ni te fijarías.
Ya estamos llegando, y lo único que prevaleció entre nosotros fue el silencio.
Quisiera gritarte, decirte lo que siento. Me decido a mirarte, te sonrio, me sonreís, me hago chiquitita y una gotita de esperanza se prende en mi corazón.
Llegamos a la parada. Por esas casualidades de la vida los dos bajamos en el mismo lugar.
Y así se termina otro miércoles sin saber ni siquiera tu nombre, pero por lo menos me atreví a robarte sonrisas y miradas.
Bajamos. Cada uno se va por su lado. Contaré hasta 3, si te das vuelta para mirarme es porque lo logré.
1
2
3
Me doy vuelta.
Te das vuelta.
'Me llamo Juan, nos vemos el miércoles.'
Seguís caminando. Lo logré!
Suspiro.
Ahora sé tu nombre, lo grabaré en mi mente. Ahora sé que sueño con Juan.
Y espero volver a verte como cada miércoles.



El Indicado.~

La vida de por sí ya es rara, pero hay rarezas que salen fuera de lo común.
Hay rarezas que para entenderlas necesitamos un manual, pero nadie se atrevió a entenderlas, y mucho menos a cuestionarlas.
Yo me propongo cuestionar las rarezas del amor.
¿Cómo olvidar a ése primer amor, o a aquellos que alguna vez despertaron una llama dentro nuestro?
¿Cómo olvidar todos esos momentos que vivimos donde nos sentimos plenos y acompañados?
¿Cómo nos arrancamos del pecho el dolor que nos quedó?
¿CÓMO LO SUPERAMOS?
Nadie nos enseña a olvidar, nadie nos explica como poder dejar el pasado en el lugar que corresponde, en el pasado.
La memoria no nos ayuda, y nos trae al presente las cenizas de aquel amor que alguna vez decidimos archivar. Pero el corazón y los sentimientos tiran, y no nos dejan en paz, nos hacen extrañar a quien ya no está a nuestro lado, a quien ya tiene otro amor. Nos preguntamos ¿Qué será de aquella persona que nos hacía sentir mariposas en la panza?, ¿Se acordará de mi, me querrá, me buscará? Pero son preguntas sin respuesta. Extrañamos a alguien que pudo soltar al viento las cenizas de lo que alguna vez tuvimos, y que quizas por eso, ya no nos recuerda.
El AMOR, quieran o no, es la base de la vida. Es lo que nos saca sonrisas, el amor nos salva, nos da paz, nos pone en nuestro eje, al fin y al cabo, el amor es lo que nos da vida.
Pero como todo, tiene un aspecto malo. Cuando alguien decide soplar con todas sus fuerzas la llama, cuando alguien de los dos decide apagar la chispa, es cuando nos ahogamos en un mar de lágrimas, y no sabemos qué hacer, porque nadie nos enseñó como actuar. Nadie nos avisó que se podía terminar, que el amor duele, y que no hay remedio que cure el dolor que nos generó. El tiempo pasa y de a poco sana las heridas, pero somos crueles, somos masoquistas y la memoria actúa en aquellos que no sabemos olvidar por completo, y nos aferramos a las heridas que ni el tiempo puede sanar.
Pero, es por eso que nos dedicamos a buscar al Amor, porque buscamos una compañía, porque buscamos sus propiedades, pero somos ignorantes y nunca aprendimos que el Amor cuando se termina, Duele, y aunque parezca raro hasta el Dolor tiene su parte positiva, y el sabor amargo que nos queda, nos hace crecer, para no repetir los errores.
Nos pasamos la vida buscando al 'Verdadero Amor', al 'Indicado', creemos que lo encontramos, pero no, no es el Amor correspondido, Él/Ella no nos ama como merecemos, aunque somos tan ilusos que le creemos y caemos en las trampas de la vida.
¿Y si mejor aprendemos a no caer en las trampas?, ¿Si no nos dejamos llevar por los sentimientos? No todo es lo que parece, no todos son un 'Gran Amor', aprendamos a dar nuestro cariño, nuestro tiempo, al Amor correspondido. ¿Por qué querer a tantos si al fin y al cabo todos nos hacen daño si no es el indicado? Y en realidad para ser felices y vivir con amor tenemos que enteder las rarezas de la vida, darnos cuentas de las señales, ver la parte positiva del dolor vivido y no repetir los errores. Tenemos que entender que aunque no parezca solemos tener el suelo en la cabeza y el cielo en los pies.~